El autismo, es parte de un grupo de trastornos conocido como trastornos del espectro del autismo (ASD). Es un trastorno neurobiológico complejo que dura típicamente a través del curso de la vida de una persona. El trastorno es caracterizado por varios grados de discapacidad en las habilidades de la comunicación y capacidades sociales, así como por comportamientos repetitivos. Los rangos de los síntomas son de leve a severo. Una forma más leve del trastorno se conoce como síndrome de Asperger. Otros trastornos de desarrollo que caen en la categoría de trastornos del espectro del autismo son el síndrome de Rett, PDD NOS (trastornos generalizados de desarrollo), y trastorno desintegrativo de la infancia. Normalmente los padres son los primeros en notar los comportamientos inusuales en sus hijos o en la falta del alcance apropiado en los indicadores del desarrollo de su hijo. Algunos padres describen un niño que parecía diferente desde el nacimiento, mientras otros describen un niño que se estaba desarrollando normalmente y después perdió las habilidades. Si usted tiene preocupaciones por el desarrollo de su hijo, no espere: hable con su pediatra acerca de una revisión a su hijo para el autismo.
Desafortunadamente, los expertos no han podido hasta el momento sacar una cura para el autismo. Muchos «tratamientos» han surgido desde que el trastorno ha crecido más visible en el dominio de la prensa, pero doctores con reputación aún tienen que estar de acuerdo con alguno que revocará el diagnóstico. Pero hay esperanza: Los científicos están trabajando duro diariamente para encontrar una solución a este problema que cada vez es mayor.
En pocos casos, el comportamiento autista es causado por:
- Rubéola (a veces llamado “sarampión alemán” en inglés) en la madre embarazada
- Esclerosis tuberosa (un trastorno genético raro que causa tumores benignos que crecen en el cerebro, así como en otros órganos vitales)
- Síndrome de X frágil (la forma más común de retraso mental hereditario)
- Encefalitis (inflamación del cerebro)
- Fenilcetonuria (PKU, por sus siglas en inglés) no tratada, cuando el cuerpo carece de una enzima necesaria para el metabolismo normal
Unas de las causas potenciales del autismo son toxinas ambientales, que incluyen pesticidas y metales pesados como el mercurio. No hay duda de que los metales pesados se encuentran más comúnmente en el ambiente hoy que en el pasado. Puede ser que las personas con autismo, o aquellos con mayor riesgo de desarrollarlo, sean más sensibles a estas toxinas que otras.
Posted: Julio Enrique Tovar Marquez
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